Prof. MSc. Fidel Miranda Silva
Historiador - Escritor
CRÓNICA DE UNA DERROTA ANUNCIADA
El
Partido Colorado es una institución de hombres libres, servidor del pueblo y de
la patria; que fue fundado por el héroe nacional Bernardino Caballero, con el
anhelo de realizar grandes propósitos para el engrandecimiento de una nación
libre y soberana, inspirado en los varones que enhiestan la bandera de la
libertad, la fraternidad y garantizar los derechos de los pueblos más
desprotegidos.
Al
igual que cualesquiera instituciones, está compuesto por varones y mujeres, con
pensamientos símiles y opuestos, honestos y ladrones, probos e incapaces. En
los últimos 30 años, el Partido Colorado fue perdiendo paulatinamente la
esencia de su doctrina, vaciado por los buitres de la política partidaria,
porque de política en sí, no han aprendido y menos aún los principios del
Partido Colorado.
La
corrupción se ha empotrados de las instituciones públicas; en consecuencia, las
inversiones de capitales se han estancado y la posibilidad de inversiones
extranjeras o propias, aún es más remota. Lastimosamente la gran mayoría de los
varones y mujeres que trabajan en ellas, en su gran mayoría son perteneciente
al Partido Colorado, que han accedido por medio de este signo político,
aclarando con son una minoría, que roban los recursos, la esperanza y el
porvenir, no solo del pueblo colorado sino en general.
Esta
práctica de corruptela por la clase “dirigencial política partidaria”, son de
una minoría, que avergüenza al Partido y al país, por más que existan varones y
mujeres probos y honestos en el “Centenario Partido”, quienes desean recuperar,
reencausar los principios republicanos, no consiguen revertir los males hechos
por los que usurparon el poder político en nombre de él.
Las
reparticiones de los poderes del Estado, en un alto porcentaje, están
corrompidas, los jueces, legisladores y algunos ministros, sin ruborizarse despluman
inmisericorde al pueblo y los recursos del erario público, en beneficio
personal. Cuando los ladrones sociales son condenados por la gente “común”,
quienes han perdido la confianza de los mismos, deben ser juzgados por estas
reparticiones del Estado, que están más corrompidos que los corruptos a ser
juzgados.
La
pérdida de la elección a intendente en CDE, por el Partido Colorado, debe ser
un toque de atención a los que están en el ejercicio del Poder Político, que
accedieron a él, por mandato popular. Los tiempos modernos exigen que los
políticos también se modernicen y estén al servicio de la gente y no para
hacerles sufrir y desatender las necesidades de las mismas. Asó como dijo el
presidente Marito, el Partido Colorado no supo dar respuesta a las quejas de la
ciudadanía del Este, a la problemática enquistado por CLAN, que ha llevado a la
deriva a la ciudad. Estas personas deben estar detrás de las rejas y devolver
lo robado.
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