60 AÑOS O MÁS – QUEDARSE EN
CASA
EXCLUSIÓN Y MARGINAMIENTO
SOCIAL POR LA EDAD.
El gobierno por medio del ministro
de salud Julio Mazzoleni, “recomienda” a las personas de 60 años para arriba que
deben aislarse “voluntariamente” del CORONAVIRUS, quedarse en casa, según manifiesta
el galeno que la mayor vulnerabilidad para la contracción de la infección de
virus está en esa franja etaria.
Existe un despropósito social de
exclusión social de personas mayores de 60 años, pero es importante analizar
que esta recomendación no surge sencillamente de los gobernantes de Paraguay,
apenas cumplen una hoja de ruta, un protocolo de la OMS, BM, FMI, ONU, etc.
etc. para los países en vía de desarrollo. Paradójicamente las personas mayores
de 60 en adelante son las que manejan la economía mundial. Donal Trump,
presidente de los EE. UU. Algunos magnates. Carl Celian Icahn, 84 años, George
Soros 90 años, Jacob Rothschild, 83 años, Mosés Israel Seif, los Rockefeller,
etc.
En Paraguay, algunas personas
mayores de 60 años están cooperando con los poderes del estado, Ejecutivo; el
caso de Euclides Acevedo, Bernardino Soto Estigarribia, Juan Ernesto Villamayor,
son ministros. En el Judicial: Dr. Raúl Torres Kirmser, Antonio Fretes, Dr.
César Garay Zuccolillo, etc. y otros. Apenas por nombrar algunos de ellos.
Con la recomendación del ministro
de salud, que las personas de 60 años en adelante se queden en sus casas,
significa que se debe reorganizar la concepción de Estado, cambiar la
constitución nacional y determinar con argumentos válidos la exclusión social
de las personas de 60 años para arriba, que actualmente “ya son inservibles para
la sociedad”.
¿Por qué la discriminación de un
sector de esta franja etaria y no del otro sector de la misma franja? Eventualmente
que las personas de 60 años deben quedarse en casa, esas personas mencionadas
en Paraguay y otras tantas, no tienen problema de quedarse en sus casas porque
han amasados fortunas para el resto de sus vidas. Además, están los jubilados,
que también se han acogidos a los beneficios que el estado paraguayo le ha otorgado,
que también no tienen ningún problema de quedarse en sus casas.
Pero están los padres de familias
que deben salir a batallar día a día para cumplir aún con el compromiso
familiar, mantener la casa. Los trabajadores autónomos: carpinteros, albañiles,
electricistas, plomeros, vendedores informales, profesionales; abogados,
profesores, prestadores de servicios ocasionales, etc. Este grupo de personas
de la sociedad, con el fin de cooperar con la transparencia en la gestión en la
recaudación impositiva, se han inscriptos al RUC., que apenas son trabajadores ocasionales,
algunos no superan ni el monto de un salario mínimo mensual, para expedir un
comprobante “legal”, a esto se debe sumar IVA, etc.
Estas personas fueron excluidas de
la posibilidad de recibir una ayuda del gobierno durante la cuarentena, y ahora
le pide que se quede en su casa. En todo caso se debería hacer un censo de este
sector de la sociedad y que el gobierno le brinde la asistencia necesaria de
acuerdo a lo que venían facturando para mantener a su familia, los datos están
n Hacienda. ¿Cómo vamos a pagar los servicios básicos mínimos y seguir
comprando alimentos, si no tenemos ingresos?
Es una discriminación irracional,
porque este sector aún es fuerte físicamente para seguir luchando por la
sobrevivencia. Hay excepciones, pero es la minoría, que probablemente están
siendo atendidos por el sector de la salud y por la secretaría de acción social
y emergencia nacional. Pero aquellos que aún tienen sobradas capacidades de
seguir produciendo recursos para la familia, no se le puede privar de ese
derecho natural que le asiste, con esta actitud, el gobierno le empuja a la
mendicidad. ¿Con qué derecho?